Unas 9.600 personas murieron desde el inicio de la crisis en el este de Ucrania, a principios de 2014, en combates entre el Ejército y separatistas rusoparlantes de las provincias de Lugansk y Donetsk.
El vocero militar ucraniano Aleksandr Motuzyanyk dijo este martes que tres soldados murieron y 15 resultaron heridos en las últimas horas en enfrentamientos en Lugansk y Donetsk.
Fuentes rebeldes dijeron que tres combatientes murieron en un enfrentamiento en Donetsk.
Los ministros de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier, y francés, tienen previsto arribar en las próximas horas a Kiev para reunirse el miércoles con autoridades ucranianas para discutir formas de detener el conflicto armado.
Alemania y Francia ayudaron a negociar un acuerdo en 2015 que se suponía que debía poner freno a los combates y decidir el estatus de las regiones controladas por los rebeldes para fines del año pasado.
Pero ni el acuerdo ni varios altos el fuego subsecuentes lograron terminar con el conflicto, que también ha dejado 2 millones de desplazados y destruido gran parte del corazón industrial de la ex república soviética.
Ucrania ya registró la muerte de cuatro de sus soldados desde que entró en vigor la actual tregua, y los rebeldes también han denunciado la muerte de varios de sus combatientes.
El gobierno de Kiev acusa a Rusia de apoyar a los insurgentes con soldados y armas, pero Moscú lo niega.
