Romero declaró que en el año 2008 se nacionalizó la lucha antinarcóticos en Bolivia, la que se encara con recursos propios, a diferencia de otras naciones.
El informe de la Unodc, difundido la víspera, refleja que entre 2015 y 2016, el cultivo mundial de coca aumentó en 36 por ciento, y ubicó a Colombia como el mayor productor con 146 mil hectáreas (ha) de cultivos (68,5 por ciento del total mundial).
Bolivia, por su parte, representa el 10 por ciento de esa cifra con 23 mil 100 ha, según el documento.
Al respecto, el titular boliviano dijo que esos resultados son producto de una política de Estado y el apoyo de las organizaciones sociales en las tareas de erradicación sin excesos y presupuesto propio, estrategia que debe ser 'permanente y sostenible'.
El representante de la Oficina de la ONU, Thierry Rostan, destacó los esfuerzos del país suramericano en la lucha contra el narcotráfico y delitos conexos.
Al presentar el Informe Mundial sobre las Drogas 2018, el funcionario refirió que implementa con el Gobierno boliviano programas de interdicción al tráfico de sustancias controladas y la incineración de marihuana y cocaína confiscada al narcotráfico.
Recordó que en junio de este año la Unodc y el ministro boliviano Carlos Romero firmaron un memorando de entendimiento para implementar el Programa Global de Control de Contenedores en la frontera occidental del país.
Sobre Bolivia dijo que se mantiene la tendencia descendente que comenzó en 2010, como resultado de una política gubernamental basada en reducciones voluntarias de cultivo de coca, paralela a la erradicación, particularmente en parques nacionales y otras áreas no permitidas.
La propia Unodc reflejó que en 2017 las autoridades bolivianas incautaron 13 mil 745 kilogramos de cocaína base, tres mil 884 de clorhidrato de cocaína y 18 mil 692 de marihuana para expendio, lo que suma 36 mil 321 kilogramos de droga.
En este país, la Ley General de la Coca vigente desde el año pasado regula la promoción, circulación, comercialización, consumo, investigación e industrialización de la planta en su estado natural y señala que esta no es una droga.
La normativa permite 23 mil ha de cultivos de coca y reconoce los valores patrimoniales de la hoja.
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