'Los estadounidenses dicen que reducirán la venta de petróleo iraní hasta cero, pero debo decir que, hasta la fecha, vendimos todas las cantidades de petróleo que necesitábamos', apuntó.
Yahanquiri denunció que el gobierno de Donald Trump se empeña en dañar la economía iraní con una guerra psicológica.
Con todo su poderío y capacidad, Estados Unidos reimpuso sanciones contra el sector petrolero iraní, pero quedó aislado en el escenario mundial, acotó el vicepresidente primero.
'...ningún gobierno de Europa, África y Asia apoya las sanciones estadounidenses, excepto Israel y un par de países de la región', indicó Yahanguiri.
El lunes último, la Casa Blanca impuso una segunda ronda de sanciones contra la República Islámica que apunta a sectores clave de la economía iraní, los del petróleo, el transporte y el bancario.
En agosto, entraron en vigor otras al igual que en mayo, tras la retirada unilateral norteamericana del acuerdo sobre el programa de energía nuclear iraní o Plan Integral de Acción Conjunta.
Donald Trump prometió dejar en cero el ingreso iraní por exportaciones de crudo, pero no pudo cumplir su promesa al verse obligado a otorgar exenciones a clientes clave de la economía del país de los persas.
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