Salas de urgencias llenas y consultas ambulatorias vacías. Los médicos de atención primaria de la sanidad pública y concertada se han plantado en Cataluña para denunciar la sobrecarga de trabajo que sufren y exigir de una vez por todas más recursos destinados a salud. Enfundados en sus batas blancas han salido a la calle para decir basta.
Miles de facultativos se han concentrado ante la sede del Instituto Catalán de la Salud (ICS), organismo gestor de la sanidad pública, para reclamar la reversión de recortes acumulados desde 2010, demandar más profesionales y recuperar 920 plazas perdidas hasta ahora para mejorar así la calidad de la atención al paciente.
La huelga ha llegado tras el fracaso previo de las negociaciones entre la Generalitat y los sindicatos y ha provocado cancelaciones y retrasos de visitas de pacientes. Aún así ha contado con el apoyo de muchos usuarios.
Durante los próximos días están previstas varias movilizaciones sociales de otros sectores económicos, tanto en la educación, como en la función pública en general, lo que podría alterar el normal funcionamiento de los servicios públicos en Cataluña si Generalitat y sindicatos no llegan a acuerdos previos.
No hay comentarios: