Select Menu

Municipios

Latinoamerica

Sociedad

.

.

Argentina

.

Deportes

Internacionales

Cultura y Educación

» » Se achica la diferencia entre los principales candidatos presidenciales franceses

(18/04/17 - Francia)-.La diferencia en la intención de voto entre los cuatro principales candidatos a la presidencia de Francia -el liberal Emmanuel Macron, la nacionalista Marine Le Pen, el conservador Francois Fillon y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon- se achicó este lunes a seis días de la primera vuelta electoral, lo que elevó aún más el clima de tensión, incertidumbre y agresividad política en la potencia europea.

Según un sondeo publicado por el diario Ouest-France, el candidato liberal Macron se mantiene como el favorito con una intención de voto del 23%, seguido de cerca por la nacionalista Le Pen con 22% y apenas separados de Fillon y Mélenchon, quienes aparecen empatados con un apoyo del 20%. 

Dado que la encuesta conlleva un margen de error del 3%, a menos de una semana de las elecciones, el resultado está más abierto que nunca. 

Por eso, además de los masivos actos que realizan día tras día los candidatos, en estas últimas horas se sumó el propio presidente Francois Hollande, quien se había mantenido hasta ahora al margen de campaña, luego de renunciar a una reelección por su falta de popularidad y de reconocer la fractura interna de su partido, el socialista, que ni siquiera está apoyando en su conjunto a su candidato, Benoit Hamon, quien cayó quinto en las encuestas, muy lejos, con un apoyo menor al 8%.

Con las encuestas al rojo vivo, Hollande decidió salir a advertir a los franceses sobre "los peligros de los extremos".

Primero apuntó contra su ex aliado socialista, Mélenchon, quien recientemente condenó la decisión del gobierno francés de apoyar el ataque de Estados Unidos contra Siria en represalia a un ataque químico denunciado por la oposición siria.

"Él no representa a la izquierda, la que yo considero que permite gobernar, y tiene facilismos que a veces caen en el simplismo.

No se puede decir que no hay responsables en las masacres químicas en Siria. No podemos pensar que (Vladimir) Putin puede hacer lo que quiera. No podemos salir de la OTAN sin que haya consecuencias, no podemos cuestionar lo que ha sido la gran construcción europea y, sobre todo, cuando se reivindica a (el ex presidente) Francois Mitterrand", sentenció el mandatario saliente en una entrevista con la cadena de noticias France 5.

"Jean-Marie Le Pen es el padre de Marine Le Pen, yo me opuse a él cuando llegó a la segunda vuelta (presidencial en 2002) y lo dije porque era un candidato que cuestionaba los valores de la República. Eso no cambio en esa familia y yo continuaré rechanzándolo y diciéndolo", dijo el mandatario, quien ya adelantó que sólo apoyará a un candidato de cara al balotaje del 7 de mayo próximo. 

Pese a las advertencias de Hollande, Le Pen sigue siendo una de las favoritas para pasar a la segunda vuelta presidencial y Mélenchon no para de crecer en las encuestas. 

"Esta semana se juega todo", arengó este lunes Mélenchon desde su "barcaza rebelde", con la que recorrió desde el suburbio noreste de París de Bobigny hasta el pintoresco canal Saint-Martin, donde lo esperaban más de mil simpatizantes. 

Al mismo tiempo, en los estadios de Bercy, en la orilla del Sena, y de Zénith, dentro del Parque de la Villette, en el norte de la capital, Macron y Le Pen encabezaban dos actos masivos, en los que ratificaron su popularidad. 

"Nosotros somos guerrerros, ustedes son guerrerros. (...) El próximo domingo se abre la gran batalla de la voluntad contra la renuncia, del optimismo contra la nostalgia mentirosa, de la transformación profunda contra el inmobilismo", lanzó el candidato de la nueva fuerza política, En Marcha.

"De los 11 candidatos, 10 quieren llevarnos de vuelta al pasado. (...) Para algunos eso sería Cuba sin el sol o Venezuela sin el petroleo -dijo en referencia a Mélenchon-. Otros quieren enfermarnos con una elección simplista: Margaret Thatcher o (León) Troski, Fidel Castro o (el referente histórico de la extrema derecha francesa, Charles) Maurras", aseguró, en referencia a sus rivales de derecha, Le Pen y Fillon.

En tanto, en el Zénith, un estadio techado con asientos para 6.000 personas, en un microclima ajeno a los manifestantes anti fascistas que por segundo día repudiaban la presencia de la principal candidata nacionalista francesa, Le Pen reiteró su promesa de instalar "una moratoria inmediata sobre toda la inmigración legal" si gana la Presidencia de Francia el próximo 7 de mayo. 

En medio de varias interrupciones de manifestantes de izquierda que intentaron tomar el micrófono y fueron arrastradas por el escenario por la seguridad privada de la campaña, la líder del Frente Nacional denunció que Francia vive "un delirio, una situación descontrolada" en materia de inmigración y prometió imponer "nuevas reglas y una nueva normativa", según el diario local Le Monde. 

Fillon, en cambio, decidió aprovechar su repunte en las encuestas después de semanas acosado por denuncias y hasta una imputación por corrupción para hacer campaña en el interior. 

Frente a 5.000 personas en la ciudad sureña de Niza, el ex primer ministro conservador apuntó directamente contra el actual favorito y quien se benefició de su caída en los sondeos después de las denuncias de corrupción: Macron. 

Lo acusó de prometer "una falsa transición" y recordó que Macron fue hasta hace unos meses el ministro de Economía del gobierno socialista de Hollande, que desde bien temprano en su mandato adoptó una política neoliberal, en contra del pasado socialdemócrata de su partido. 

Con el gobierno socialista sumido en el peor nivel de popularidad en años y la derecha tradicional en crisis con su candidato imputado por corrupción, las fuerzas alternativas, de derecha y de izquierda, crecen en los últimos días de la campaña presidencial francesa, pero no tanto como la opción que se propone como independiente y como la renovación de una clase dirigente y poderosa, a la que, no obstante, pertenece.

«
Siguiente
Entrada más reciente
»
Previo
Entrada antigua