"Ya dije antes que si el Parlamento aprueba la pena capital, yo la firmo", dijo Erdogan durante un discurso en la ciudad de Manisa, en el oeste del país, que transmitió la cadena NTV. Ergogan hacía campaña por la reforma constitucional que se votará en referéndum el 16 de abril y que, de aprobarse, le otorgará poderes extraordinarios.
La consulta, aprobada en enero pasado en el Parlamento con la mayoría necesaria de tres quintos, propone entregar todo el Poder Ejecutivo, que ahora recae mayormente en el primer ministro, al presidente de la República, es decir, a Erdogan.
El cargo de primer ministro, de hecho, será eliminado.
También prevé elevar el número de diputados de 550 a 600 y bajar la edad para poder ser elegido de 25 a 18 años.
Es más, mediante este sistema presidencialista podría ser reintroducida la pena de muerte.
El propio Erdogan había lanzado la idea de volver a poner en marcha la pena de muerte después del fallido golpe de Estado del 15 de julio pasado, y desde entonces sus seguidores vitorean en todos sus discursos con gritos de "Queremos la pena de muerte".
"Solo hay un problema: hace falta modificar la Constitución. Voy a decir una cosa: para eso podemos preparar otro referéndum. Si no se aprueba la reforma en el Parlamento, propongo que hagamos un referéndum. Nos dirigiremos a la nación. Si la nación dice 'Pena de muerte', se acabó el tema", dijo Erdogan, citado por la agencia de noticias EFE.
La firme oposición del partido socialdemócrata CHP y el izquierdista HDP a la pena capital no permite formar una mayoría de dos tercios en el hemiciclo, necesaria para reformar la Constitución, pero sí una de tres quintos, suficiente para convocar un plebiscito.
Turquía no ha llevado a cabo ejecuciones desde 1984, y una reintroducción de la pena de muerte significaría cortar vínculos con el Consejo de Europa, además de lastrar las negociaciones para poder ingresar a la Unión Europea (UE).
La tendencia a favor de la pena capital se alimenta por el resentimiento contra "los traidores" responsables de la asonada de julio pasado, pero según los juristas turcos, este castigo solo se podría aplicar a delitos cometidos después de su aprobación.
