Si bien el agua acumulada escurrió en algunas zonas, como en Santa Lucía, lo hizo de forma tan escasa que no significó una disminución en la cantidad de afectados, según explicó el titular del área, Eulogio Márquez, a la vez que confirmó que la cantidad de damnificados supera las 15.000 personas.
El funcionario detalló que si bien las lluvias no fueron muy intensas en los últimos días, “el problema es que se suma al agua acumulada, lo que genera muchos inconvenientes”.
En este sentido, señaló que la situación continúa “muy complicada” en las localidades del sur provincial, como Sauce, Esquina, Pueblo Libertador, como así también en Santa Lucía, San Luis del Palmar, Mocoretá, entre otras, y agregó que el desborde de arroyos y ríos internos, como el Batel, Santa Lucía, Sarandí, agrava aún más las consecuencias.
“Hay lugares afectados en los que nunca se vivió nada igual, como Esquina”, dijo Márquez en diálogo con radio Dos.
Por otra parte, el director de Defensa Civil señaló que “ahora tenemos un alerta meteorológico en la zona norte de la provincia, pero la situación en la zona sur continúa siendo la más comprometida”.
En este marco, el intendente de Esquina, Humberto Bianchi, confirmó que las precipitaciones continúan en la localidad.
“Eso significa que continuamos con muchas viviendas afectadas, con pérdidas totales, los caminos y calles están intransitables, inclusive las calles de pavimento de hormigón armado, con hundimiento de suelo”, relató el jefe comunal.
Confirmó además que la cantidad de afectados por las inundaciones “ronda las 5.000 familias” en el Departamento.
Por su parte, el intendente de Santa Lucía, Carlos Sanánez, afirmó que pese a que hubo cierto escurrimiento del agua acumulada, “la gente afectada continúa fuera de sus casas, no ha podido regresar”.
En cuanto a la asistencia, dijo que el Gobierno de la provincia “tiene buena predisiposición” y que hoy llegó a Santa Lucía “un camión con asistencia proveniente del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación”.
