"Enero y febrero son los momentos más críticos de los impactos del fenómeno de El Niño, que se cobró la vida de 14 personas por imprudencia y las descargas eléctricas", confirmó Cabrera en declaraciones al programa de entrevistas El Pueblo es Noticia que emiten las estatales radio y televisión. El fenómeno que causa inundaciones y desbordes de ríos y, por contraste, sequías, afectó a 20.600 familias de 78 municipios del Chaco boliviano (Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija), el occidente, oriente y norte de La Paz. Defensa Civil, a través del brazo operativo de las Fuerzas Armadas, movilizó a las zonas afectadas 300 toneladas de ayuda humanitaria, consistente en alimentos (azúcar, fideo, aceite), medicamentos y otros insumos.
Cabrera exhortó a las poblaciones ribereñas mayor precaución, porque las lluvias torrenciales, de corta duración y las fuertes, amenazan con desencadenar desastres.
Según los reportes, aseveró que no se registraron inundaciones en los departamentos de Pando y Beni, pero Defensa Civil se mantiene en emergencia ante cualquier contingencia. Dijo que el gobierno de Evo Morales ha prevenido la situación con "la construcción de los anillos de protección ( deflectores) y los camellones (plataformas) para la evacuación de ganado en Trinidad, Santa Ana del Yacuma, San Joaquín, San Borja y otras del departamento del Beni".
