El ayuntamiento de Puerto Príncipe comenzó los trabajos de limpieza en la popular avenida de Delmas, epicentro de las protestas y donde grandes establecimientos y mercados fueron saqueados y quemados durante las manifestaciones del viernes y sábado.
Según las autoridades, la higienización de la avenida se inició en Delmas 95 y se extenderá hasta Delmas 2 en el centro de la ciudad, para cumplir una de las promesas del presidente Jovenel Moise durante una alocución con la cual también llamó a los protestantes a regresar a sus casas.
'Me enviaste el mensaje y lo recibí. Corregí lo que necesitaba ser corregido. Pero ahora te pido que mantengas la calma y te vayas a casa', dijo el mandatario el sábado y pidió a los ciudadanos no dejarse influenciar o utilizar por otros actores con intereses políticos determinados.
El anuncio del alza de los productos derivados del petróleo, medida revocada unas 24 horas después, provocó una ola de violencia en el país por el incremento de entre el 38 y 51 por ciento del precio de la gasolina, el petróleo y el kerosene, una medida que responde a los compromisos del gobierno con el Fondo Monetario Internacional para reducir el déficit público. Aún casi tres días después permanecen cerrados los establecimientos comerciales, negocios y otros, aunque algunos supermercados comienzan a vender productos con reforzadas medidas de seguridad.
También los vendedores ambulantes, que representan casi el 80 por ciento de la fuerza laboral, regresaron a las calles tras la calma aparente que vive el país.
Sindicatos y grupos opositores anunciaron una huelga general para este lunes y martes, y muchos ciudadanos permanecen en sus casas por temor a que la situación se vuelva tensa otra vez.
Por su parte, el diputado Jerry Tardiu solicitó al Parlamento la reanudación de la interpelación al primer ministro Jack Guy Lafontant, al que también acusan de mala gestión ante la crisis del país.
