En un discurso realizado el sábado en el marco de su programa "Gobernando con la Gente", tildó de “injusto y manipulado” el golpe parlamentario, disfrazado de juicio político (impeachment), contra Rousseff y dijo que desde que la exmandataria fue suspendida de sus funciones, el Gobierno salvadoreño denunció que se estaba cometiendo una injusticia.
“Nosotros hemos dicho que hay una manipulación política en ese proceso y no se ha comprobado la responsabilidad criminal de la presidenta”, subrayó el pmandatario de El Salvador para luego afirmar que Rousseff fue acusada de hechos que nunca sucedieron.
El miércoles, el Senado de Brasil destituyó a Rousseff de su cargo por irregularidades fiscales, con 61 votos a favor y 20 en contra. El jueves, la exmandataria apeló su destitución ante el Tribunal Supremo Federal (TSF).
En otra parte de sus declaraciones, hizo una alusión a la situación que vive Venezuela, donde recientemente ha sido escenario de marchas tanto de los opositores como de los partidarios del Gobierno.
Tras manifestar su solidaridad con el presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció públicamente “la ola desestabilizadora” que afecta al país suramericano.
A su juicio, las provocaciones de la oposición atentan contra la estabilidad democrática y los avances políticos y de integración de la región suramericana.
“Estamos dando seguimiento al proceso para proceder a dar otros pasos (pues) no vamos a permitir que en América Latina se imponga una modalidad de golpes de Estado suaves”, que resultan en la destitución de Gobiernos que han sido electos de manera democrática.
Al respecto, la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) expresó el miércoles su preocupación ante las amenazas de la derecha venezolana contra el sistema democrático en ese país que intenta derrocar a Maduro, aplicando las estrategias que están enmarcadas en un plan contra los gobiernos progresistas, populares y de izquierda de la región, añadió.
