“Hay una suma de atropellos a las libertadas públicas, a la división de poderes, al estado de derecho que es inimaginable. De repente de la noche a la mañana vuelve la represión, la persecución y la censura. Esto que le sucedió a Víctor Hugo viene precedido por la exclusión de los medios públicos de decenas de periodistas de prestigio simplemente porque piensan distinta al Gobierno”, aseguró el referente del Movimiento Nacional Alfonsinista FORJA.
En diálogo con Radio de Plata, Moreau señaló que en la actualidad “hay persecución ideológica de parte del Estado” y dijo que durante el gobierno de Raúl Alfonsín no se persiguió a nadie por ideología política. “Al contrario, reincorporamos a todos los echados del Estados por el proceso militar”.
En este línea, continuó: “El menemismo no persiguió a los militantes alfonsinistas que se incorporaron a trabajar al Estado. El delarruismo no persiguió a los menemistas, Duhalde no persiguió a los delarruistas, Kirchner no persiguió a sus antecesores”.
En este punto, Moreau indicó que para el gobierno de Macri pasó a ser un delito ser militante. “La vicepresidenta de la Nación dijo que iban a echar a los militantes del aparato del Estado. O sea que pasó a ser un delito no tipificado por el Código Penal, pero pasó a ser un delito para el Gobierno de Macri ser militante”.
“Dictan decretos de necesidad y urgencia que en algunos casos parecen más bandos militares que actos de la Constitución”, agregó.
Consultado por la alianza de la UCR con el PRO en el gobierno macrista, manifestó que “si los dirigentes radicales mantienen los valores, ahora tienen un gran desafío por delante. Ya es hora que se pronuncien claramente cada uno de ellos. Habría que llamarlos para preguntarles qué piensan.
Además convocó a una marcha para el 1 de marzo: “Todos los argentinos tenemos que organizar una enorme movilización el 1 de marzo, que es el día que se inician las sesiones ordinarias en el Congreso, para que los legisladores sientan que el pueblo está reclamando que actúan en defensa de estos derechos elementales”.
“Es evidente que estos son actos autoritarios que parten de un presidente autoritario. Son republicanos en la oposición y cuando están en el Gobierno son autoritarios”, subrayó.
“Esa es la hipocresía por ejemplo de Elisa Carrió, que pide que no asuma Echegaray en la Auditoría General de la Nación por un proceso inexistente pero no se preocupa por el procesamiento que tiene (Federico) Sturzenegger confirmado hace días atrás por la Corte por el robo que significó el Megacanje, dejando endeudada a la Argentina en 55 mil millones de dólares. Esa es la hipocresía del falso republicanismo”, cerró.
